Mi portera tiene cinco cuerdas de tender en su ventana y todas las mañanas me despierta con una canción horrible que lee en las pinzas de la ropa. Mi mi sol sol mi mi sol sol si. En notación americana: Pantalón pantalón camiseta pantalón braga braga calcetín.
Lleva tres semanas casi sin salir de casa. Cuando lo hace va con ropa vieja, despeinada y mirando al suelo. Ha dejado de hablar con la gente, apenas saluda y parece que ya no le interesa la vida de los vecinos. Algunos pensamos, por lo que puede oírse desde el patio de luces, que está trabajando en un sistema dodecafónico.
Con los años ha perfeccionado su técnica musical, y aunque todavía no ha conseguido distinguir las notas entre las cuerdas (el La, por ejemplo, nunca lo canta), ha desarrollado un método para marcar el tempo según los colores de las pinzas. Las verdes son corcheas, las amarillas semicorcheas, y así.
Lleva tres semanas casi sin salir de casa. Cuando lo hace va con ropa vieja, despeinada y mirando al suelo. Ha dejado de hablar con la gente, apenas saluda y parece que ya no le interesa la vida de los vecinos. Algunos pensamos, por lo que puede oírse desde el patio de luces, que está trabajando en un sistema dodecafónico.
5 Comments:
La música de aquella vecina seca su ropa incluso en días de lluvia.
Genial, como siempre.
Qué placer volver a entrar a este blog, maestro.
Cristo del amor hermoso, una portera así es carne de baja por depresión...
Ayudarla a ser lo que debe ser una portera...
tu deja que ella practique :)
Autor, el whisky es doble
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